Hasta la próxima
HISTORIAS DESTACADAS
Me bautizaron católica cuando tenía dos años y al crecer en parte era practicante, pero no estaba completamente comprometida. Personalmente, no encontraba un interés o amor por mi fe hasta este mes de enero que acaba de pasar. Realmente sentí un llamado en mi corazón para meterme más en mi fe y ser realmente parte de la Iglesia Católica.
Nunca fui confirmada de niña y nunca recibí catequesis. Y así, en enero, tuve el valor de conversar con el capellán del Ministerio del Campus Católico de Detroit (DCCM), y me apunté en OCIA para comenzar el proceso para ser confirmada y recibir mi Primera Comunión.
Tuve una conversación profunda con el P. Matt, capellán de DCCM, durante la cual discutí mi deseo de ser confirmada. Y después de esa conversación, estaba realmente insegura de a qué me había comprometido exactamente. Esta fue una decisión enorme que cambió mi vida. Estaba emocionada, pero también estaba muy nerviosa.
El día después de tener esta conversación, fui a adoración. Fui al Santuario Nacional de la Basílica de la Pequeña Flor y visité la capilla de adoración. Era mi primera vez en esa iglesia y también mi primera vez en adoración. Simplemente llevé mis preocupaciones. OCIA ya había comenzado meses antes, y no estaba segura de que pudiese entrar tan tarde o si estaba lista para hacer este compromiso.
Pero cuando traje todas estas preguntas a la oración durante adoración, solo tenía los ojos cerrados y, en mi mente, vi esta mano extendiéndose hacia mí. Nunca antes había experimentado algo así en oración. Pero con eso, me sentí segura al saber que Jesús quiere guiarme por este camino. No estoy caminando sola en este nuevo trayecto. Jesús está velando por mí.
Pude unirme a OCIA y recibí la Confirmación y mi Primera Comunión en la Vigilia Pascual de este año. Ahora, ir a misa, es una experiencia totalmente diferente. Cada vez que voy en la línea de la Comunión, es muy emocionante. En la Vigilia Pascual, pensé: 'Eso no es solo hoy en la Vigilia. Esto será en cada misa". Ha sido grandioso ser parte de esto.
Hasta la próxima
VIVE LA EXPERIENCIA
Jesús está realmente presente. Jesús siempre está contigo. Siéntate en su presencia y ábrete a su voz.